REDEFINIR LA NUEVA FUNCIÓN DEL MÉDICO
El ritmo de crecimiento del conocimiento en medicina es muy
alto y se ha evidenciado con contundencia durante la pandemia-covid19. Esto va modificando
el rol del médico como profesional.
Conviene aclarar que
la función del médico en cuanto rol asistencial ya no se personifica
necesariamente en una figura humana. Las decisiones, que provienen de estudiar
el caso a la luz de un conocimiento que se actualiza por instantes, terminan
por tomarlas los grandes ordenadores que disponen de una información colosal (big-data).
Si el médico humano es simple correa de transmisión entre
las centrales informáticas y el paciente, entonces su papel queda mermado y
subsumido a una función simplemente comunicadora con el enfermo. Esto si bien
no es poca cosa, no se acerca a lo que se espera del médico como intervención
asistencial.
Se impone redefinir la tarea del médico que se ha formado
en ambientes académicos pero que posteriormente sólo mantiene un leve contacto
con los organismos decisorios en lo que concierne a la salud.
Los sitios de producción de conocimiento diseñan y dominan
esta secuencia con precisión. Así es como las universidades transmiten un
caudal de datos a los estudiantes de medicina tal que no se había producido
nunca antes, sabiendo que cuando al médico le llegue el turno de tratar al
enfermo, su capacidad de decisión real será mínima. Y cuanto más conocimiento
menos poder decisorio.
¿QUÉ ELEMENTOS HAY QUE TENER EN CUENTA PARA DEFINIR ESTA
NUEVA FUNCIÓN?
¿Qué lugar ocuparía la mera evidencia científica en el
nuevo rol del médico humano? ¿Su perfil, caracterizado por el acopio de
conocimientos, se solaparía inevitablemente con el del médico informático?
En su actuación ¿habría lugar para la especulación, la
contraposición de pareceres, la elección de una determinada línea teórica o
especulativa? ¿Sería posible que su actuación estuviera determinada por
tendencias ideológicas? ¿Habría lugar para un médico demasiado intervencionista?
¿Y para el mínimamente intervencionista? ¿Podría el médico interpelar al
paciente acerca de sus preferencias, sus deseos sobre cómo enfocar su vida
futura en cuanto a costumbres, hábitos o conductas relacionadas con su salud?
¿Buscará el enfermo al médico que mejor comprendiese su sello personal en lo
que atañe a la vida que él quiere para sí?
Concuerdo y y así, es...
ResponderEliminarPor ser ,muy preciso y de importancia pública y selecta, bajo autorización, voy a intentar compartirlo .
ResponderEliminarSaludo Maestro, Dr Ricardo Ancarola.
Un saludo. Gracias.
Eliminar